El panorama político dentro del Partido Republicano está experimentando movimientos significativos. Una encuesta reciente de la Universidad Suffolk destaca el predominio de Donald Trump con un impresionante 49% de apoyo, mientras que Nikki Haley emerge superando a Ron DeSantis, ahora con un respaldo del 19%.
Ante estos cambios, el gobernador de Florida, DeSantis, está recalibrando su estrategia. Tras descubrir que Haley ahora le aventaja en ciertos sondeos, intensificó su campaña en Florida, declarando durante un evento en Tampa que "Florida es el estado más libre en Estados Unidos". Este enfoque en Florida marca un cambio de su enfoque anterior en estados como Iowa y Carolina del Sur.
El comentario de DeSantis no solo busca solidificar su base en Florida, sino que algunos expertos sugieren que también está buscando financiamiento. Mike Hernández, analista político, opina: "DeSantis está maximizando sus esfuerzos para obtener contribuciones de donantes antes del caucus de Iowa". De hecho, DeSantis tiene planeado un evento de recaudación en Miami, donde las entradas oscilan entre $3.300 y $11.600 por individuo.
A pesar de estos esfuerzos, es esencial destacar que hace apenas un año, una encuesta similar de la Universidad Suffolk señalaba que el 65% de los votantes republicanos deseaban que DeSantis se postulase. Sin embargo, la lealtad del partido hacia Donald Trump sigue siendo evidente. Hernández añade: "Aunque muchos republicanos creen en el liderazgo de DeSantis, la sombra de Trump sigue siendo alargada".
Los ojos del partido ahora se centran en Florida, con dos eventos clave próximos: la Cumbre de la Libertad de Florida el 4 de noviembre y el tercer debate republicano el 8 de noviembre.
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