Fuente: Facebook Nostalgia Cuba / Francisco Valiente
Con un sentimiento de luto y recuerdo, el mundo de la música despide a una de sus figuras más emblemáticas, Olga Chorens, quien falleció el día de ayer a las 6:45 p.m. en su residencia de Miami, acompañada de su familia. A menos de un mes de cumplir 100 años, la cantante cubana dejó un legado imborrable en el arte y la cultura, con una carrera que abarcó más de ocho décadas.
Sus hijas, Olguita y Lissette Álvarez, expresaron su pesar a través de un comunicado en el que rememoran a su madre como un ser extraordinario y talentoso. "Aunque nos invade la tristeza de haber perdido un ser tan maravilloso, viviremos agradecidas de que Dios nos dio una madre cariñosa, talentosa y extraordinaria", declararon. Además, compartieron su consuelo en saber que Olga ha reencontrado a su esposo en el más allá, "sabemos que al fin te reuniste con Papi y que juntos siguen cantando como los ángeles que ya son".
Una carrera de leyenda
Olga Chorens, a lo largo de su prolífica carrera, deleitó a su público en diversos escenarios, desde la música hasta la televisión, la radio y el cine. Su voz y su carisma hicieron eco en varias generaciones, consolidándola como una de las artistas más queridas y respetadas de su tiempo.
Nacida el 7 de febrero de 1924, estaba a punto de cumplir su centenario, una ocasión que sus fanáticos esperaban celebrar con jubilo y reconocimiento a su monumental trayectoria. Sin embargo, su legado vivirá eternamente a través de sus innumerables contribuciones al mundo del entretenimiento.
Un último adiós
La familia Álvarez anunció que se realizarán homenajes post mortem en honor a Olga Chorens, permitiendo a fans y colegas la oportunidad de rendirle tributo y despedirse de la diva cubana. Agradecen de antemano el apoyo y amor de todos sus seguidores en estos momentos de tristeza y recuerdo.
"Nos llena de paz saber que sus admiradores que siguieron con tanto amor su legendaria carrera […] nos acompañan en este momento tan difícil. Descansa en paz, Mamita", expresaron sus hijas, resaltando la conexión especial entre Olga y su público, que siempre la acompañó con cariño y admiración.
En medio del dolor, la comunidad artística y el público en general recuerdan con gratitud y admiración a Olga Chorens, una mujer que con su talento y amor por la música, marcó la historia cultural de Cuba y del mundo. Su voz, su sonrisa y su esencia perdurarán en el corazón de todos aquellos que tuvieron el privilegio de conocerla y disfrutar de su arte.
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