Según las autoridades de salud en Gaza, un presunto bombardeo en el Hospital al-Ahli en la región de Khan Younis resultó en la trágica pérdida de más de 500 vidas palestinas. Si se confirma, este incidente marcará el episodio más mortífero en las múltiples confrontaciones entre Israel y Hamas desde 2008. Mientras tanto, Israel ha declarado que está investigando los reportes del ataque.
Paralelamente, los esfuerzos mediadores se intensifican para canalizar ayuda a los millones de civiles en el asediado territorio, cuyas condiciones se han deteriorado tras los recientes enfrentamientos en la frontera entre Israel y Líbano, aumentando las preocupaciones de un conflicto regional más amplio.
Residentes reportan que los heridos han estado llegando a los hospitales locales tras los ataques en las afueras de las ciudades de Rafah y Khan Younis. Además, se reportó que en Deir al Balah, un ataque redujo una casa a escombros, resultando en la muerte de nueve miembros de una familia.
Las fuerzas israelíes declaran que están enfocadas en objetivos militares de Hamas. El teniente coronel Richard Hecht, vocero del ejército israelí, subrayó la determinación de las fuerzas armadas en neutralizar cualquier amenaza percibida de Hamas.
Las tensiones continúan escalando tras el reciente ataque en el sur de Israel, donde se reporta que milicianos mataron a 1,400 personas y retuvieron a aproximadamente 200, quienes permanecen en Gaza.
Los persistentes bombardeos han dejado al menos 2,778 muertos y 9,700 heridos en Gaza, con una estimación adicional de 1,200 personas atrapadas bajo escombros, vivas o muertas, según las autoridades de salud. Los equipos de rescate enfrentan desafíos críticos debido a la falta de acceso a comunicaciones básicas, combustible y el constante riesgo de bombardeos.
El lunes, un ataque aéreo israelí impactó la base de Defensa Civil en la Ciudad de Gaza, causando la muerte a siete paramédicos. Además, otros 10 trabajadores médicos han perdido la vida en la línea del deber.
Mientras tanto, Israel ha acumulado tropas en la frontera, anticipando una posible ofensiva terrestre, aunque no se han tomado decisiones definitivas al respecto. La combinación de ataques aéreos y la evacuación masiva ha sumido al territorio en un estado de desesperación.
La situación humanitaria es crítica, con más de un millón de palestinos desplazados y hospitales al borde del colapso. En el único hospital especializado en cáncer en Gaza, algunos departamentos han cesado operaciones por falta de combustible. En el paso de Rafah, camiones de ayuda humanitaria esperan para entrar al territorio mientras las negociaciones para un cese al fuego y la apertura de la frontera continúan.
El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, y el general Erik Kurilla, del Comando Central de los Estados Unidos, han llegado a la región para dialogar sobre la situación y explorar formas de canalizar ayuda humanitaria a los afectados en Gaza.
A medida que los mediadores buscan un acuerdo para un cese al fuego y la apertura de la frontera, la comunidad internacional observa con creciente preocupación, anticipando las conversaciones entre líderes en los próximos días para evitar una escalada del conflicto en una región ya sumamente tensa.
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