Nacido como Severo Alberto Borges Abreu el 8 de agosto de 1933 en Batabanó, Cuba, Lino Borges emergió como una de las voces más destacadas del bolero cubano. Desde sus humildes inicios en Batabanó, Borges dejó una marca indeleble en la música latinoamericana.
A los 16 años, Borges inició su carrera profesional con la orquesta de J. R. González. Su talento lo llevó a colaborar con reconocidos conjuntos como Universal, Casablanca, Rumbavana y Saratoga, siendo con este último con el que permaneció dos décadas antes de emprender una exitosa carrera como solista.
Expertos en música de la isla han situado a Borges entre las luminarias del bolero en Cuba, al lado de figuras legendarias como Vicentico Valdés, Abelardo Barroso, y Pacho Alonso, por nombrar algunos.
Para los venezolanos, Borges se convirtió en un ícono en los años 60 y 70, especialmente por su interpretación de "Vida Consentida", una pieza dedicada al romance, compuesta por el Dr. Homero Parra. Su voz se convirtió en un símbolo, resonando en bares, cantinas y radios no solo en Cuba, sino también en Venezuela, Colombia, Puerto Rico, México, y más allá.
En 1990, Borges fue el centro de atención en un homenaje por el 25° aniversario de "Vida Consentida" en Venezuela, un evento que marcó el año artístico en ese país.
Con su fallecimiento el 23 de agosto de 2003, el mundo de la música perdió a "la voz del bolero". Sin embargo, su legado sigue vivo, y su música continúa resonando en el corazón de sus admiradores. Borges fue sepultado en su amada Batabanó, donde siempre fue considerado un hijo predilecto.
Sus últimas presentaciones tuvieron lugar en el Salón Bolero (Dos Gardenias), donde era una figura esencial. Al momento de su deceso, estaba en preparativos para una gira por República Dominicana, un lugar donde su música sigue siendo venerada.
Fuente: The Cuban History, Hollywood. Arnoldo Varona, Editor. Agradecimiento especial a Rey Gonzalez por la información compartida.
Imágenes: LinoBorges/InternetPhotos/YouTube
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