El líder mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha propuesto actuar como mediador para fomentar el diálogo entre Estados Unidos y Cuba. A raíz de una reciente cumbre sobre migración en Palenque, México, López Obrador expresó su intención de reforzar su posición en la región, buscando mejorar las relaciones entre Washington y La Habana. Durante este encuentro, manifestó su descontento con las medidas restrictivas aplicadas a Cuba y anunció que se comunicaría con el presidente estadounidense, Joe Biden, al respecto.
Esta cumbre en Palenque, a la que asistieron líderes de varios países latinoamericanos, tenía como objetivo establecer una postura unificada frente a la creciente crisis migratoria. México busca mostrar su disposición para discutir sobre la migración y demostrar que puede ser un socio clave para dialogar con naciones en conflicto con Estados Unidos, como Cuba y Venezuela.
La presencia de figuras como Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro en la cumbre no estuvo exenta de controversia. Sin embargo, López Obrador cree que marginar a ciertos actores diplomáticos puede ser contraproducente para abordar los problemas regionales. A su vez, expresó su deseo de que Estados Unidos inicie conversaciones con Cuba y mencionó los esfuerzos previos de la administración de Barack Obama en este sentido, aunque aún no se sabe si Biden está dispuesto a retomar esa ruta.
La última interacción significativa entre México y Estados Unidos tuvo lugar en una reunión en Ciudad de México, pero la situación se complicó tras el anuncio de Biden de extender el muro fronterizo. México prefiere abordar la migración desde una perspectiva cooperativa y compartida, y ve las sanciones a Cuba como una pieza clave en las discusiones. López Obrador ha subrayado la necesidad de abordar las raíces de la migración y ha criticado firmemente el bloqueo a Cuba.
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