En una tragedia que sacudió a Johannesburgo, un edificio residencial de cinco niveles fue escenario de un incendio devastador que resultó en al menos 73 muertes y 43 heridos. El incidente está bajo investigación y las causas aún no se han determinado. "Es algo que nunca antes había presenciado", declaró Mgcini Tshwaku, director de Seguridad Pública de la ciudad, haciendo referencia a la gravedad del siniestro y a los cuerpos quemados casi irreconocibles que se encontraron.
Según Tshwaku, varios factores contribuyeron al elevado número de víctimas. Entre ellos, se encontró una puerta bloqueada que parecía haber restringido la evacuación de los ocupantes, y la presencia de material altamente inflamable en un asentamiento informal en la planta baja del edificio. Además, la estructura del edificio estaba segmentada por numerosos tabiques y puertas internas, lo que complicó aún más la situación.
Mientras tanto, equipos especializados en la atención de desastres están trabajando incansablemente para ayudar a los sobrevivientes. Los esfuerzos incluyen la distribución de artículos de primera necesidad como colchones, así como la búsqueda de alojamiento temporal.
En respuesta al trágico suceso, la Unión Africana manifestó su solidaridad con el pueblo de Sudáfrica. Mahamat, en una publicación en su cuenta de la red social X, expresó: "Nuestro corazón y nuestras oraciones se vuelcan hacia las familias afectadas por esta tragedia. Estamos firmemente al lado del Presidente Cyril Ramaphosa y el pueblo sudafricano en este doloroso momento".
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