Un grave accidente tuvo lugar en Mestre, cercano a Venecia, cuando un autobús se desplomó desde un paso elevado hasta las vías del tren. La fatalidad ha dejado hasta el momento un saldo de 21 muertos, incluyendo dos menores, y 18 heridos, algunos de ellos en estado crítico. Adicionalmente, se estima que entre cuatro y cinco personas siguen desaparecidas.
El siniestro se produjo alrededor de las 19:30 horas del martes, cuando el autobús cayó desde un viaducto de aproximadamente 15 metros de altura, impactando cerca de un almacén y las vías del tren. Durante su caída, el vehículo impactó contra cables eléctricos, lo que generó un incendio, posiblemente agravado por su sistema híbrido de combustible.
Fuentes locales informaron que a bordo del autobús, que era de una ruta regular, viajaban varios turistas y un grupo de ciudadanos de origen ucraniano.
En respuesta al accidente, la Autoridad Sanitaria de Venecia activó un protocolo de emergencia, que incluyó la movilización de al menos 40 ambulancias al sitio del siniestro.
El alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro, describió la escena como "apocalíptica" y sugirió que el número de víctimas podría aumentar a medida que avanzan las labores de rescate. Por su parte, el gobernador de la región de Véneto, Luca Zaia, y la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, expresaron sus condolencias y ofrecieron su apoyo a las víctimas y a las autoridades locales.
Asimismo, el presidente de Italia, Sergio Mattarella, ha transmitido sus condolencias a través de la red social X, y ha estado en comunicación con el alcalde Brugnaro para estar al tanto de la situación y ofrecer la ayuda necesaria.
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